Las personas que trabajan en control de animales deben hacer maniobras un tanto extrañas para proteger a los animales o para proteger a las personas de los animales. 

En esta ocasión se trata de un rescate que ha tenido lugar en el campus de Chabot College (California, Estados Unidos). Una madre pata y sus doce patitos paseaban por esta zona cuando once de los patos cayeron por un desagüe de agua. 

La pata comenzó a graznar a los patitos tras perderlos, lo que llamó la atención de un transeúnte que pasaba por allí en ese momento. El personal del campus quitó la reja de la alcantarilla para intentar alcanzarlos, pero estos se internaron en las profundidades de las tuberías, asustados. 

Susan Perez, oficial de control de animales de Hayward, llegó y se metió en el desagüe para tratar de sacar de ahí a los animales. Para ello, se sirvió de un truco que resultó ser muy efectivo. Susan usó su teléfono móvil para reproducir sonidos de una pata y así atraer la atención de los pequeños y que se acercaran para que ella pudiera sacarlos. 

La idea dio muy buen resultado y, uno a uno, la oficial fue sacando a los patos del desagüe para que se reunieran con su madre de nuevo. Una historia trágica, pero con un final muy feliz gracias a la experiencia de Susan con animales.